Calcular tus días fértiles es súper importante, tanto para evitar embarazos no deseados como si estás buscando quedar embarazada. Muchas mujeres y personas menstruantes no saben cómo funciona su ciclo y cómo monitorearlo, aquí te explicamos!
Muchas mujeres y personas menstruantes suelen tener confusión de su propio ciclo menstrual, ya sea porque son irregulares, porque nunca les enseñaron a monitorearlo o por falta de información. Sin embargo, es muy importante que cada quien sepa el comportamiento de su ciclo para poder tomar mejores decisiones respecto a su salud.
Antes que nada, debes saber que un ciclo menstrual normal va de los 21 a 35 días. Esto puede variar; sin embargo, sigue siendo normal sangrar dentro de este intervalo de tiempo.
Si tu ciclo es más corto o más largo de este intervalo, se considera que eres una paciente con ciclos menstruales irregulares.
Determinar nuestros días fértiles es mucho más fácil cuando tus ciclos son regulares. Así es que estos ejemplos los realizaremos pensando que eres una paciente que menstrúa cada 30 días.
Los días fértiles son los días en los que tu cuerpo, junto con tus hormonas, hacen que el óvulo sea fecundado y así puede aumentar la posibilidad de tener un embarazo.
Hay diferentes formas para descubrirlo, las cuales voy a mencionar a continuación:
La ovulación se presenta aproximadamente durante el día 14 del ciclo menstrual. Teniendo en cuenta que la vida del espermatozoide y del óvulo puede variar de 24-72 horas, tus días de mayor probabilidad fértil son del 8 al 18 del ciclo. El primer día del ciclo menstrual es el primer día que presentas tu menstruación.
La ovulación provoca elevación de tu temperatura corporal cuando estás en reposo. La temperatura corporal normal está entre 36.5 y 36.7, pero durante tus días fértiles notarás un incremento de hasta 0.3 y 0.5 grados centígrados. Es por eso que justo antes de tu siguiente menstruación, tu temperatura regresa a las cifras normales y esto puede indicar que ya no estás pasando por tus días fértiles.
El moco cervical puede estar presente siempre sin ser precisamente patológico o requerir tratamiento. Este moco tiene diferentes etapas de acuerdo al día de tu ciclo, ya que esto contribuye al transporte espermático, permitiendo así la migración espermática rápida (cómo los espermatozoides viajan rápidamente en el cuerpo de una mujer para llegar al óvulo y fertilizarlo); también favorece el camino de los espermatozoides para fecundar el óvulo. Es por eso que a la mitad del ciclo puede que hayas notado que la textura del flujo cambia y se vuelve muy pegajosa, esto es a causa de la acción de los estrógenos. En los dos o tres días anteriores a la ovulación, el flujo aumenta, se hace transparente y su textura cambia, este flujo es similar a la de la clara de huevo. Poco a poco el flujo se va poniendo más y más espeso y seco, es aquí cuando la ovulación concluye.
Comprender y rastrear tu ciclo menstrual es una herramienta fundamental para tomar decisiones informadas sobre tu salud y fertilidad. Aunque los ciclos menstruales pueden variar de una persona a otra, la regularidad puede simplificar la identificación de tus días fértiles, un factor crucial si estás considerando la planificación familiar (recuerda que en Plenna tenemos consultas preconcepcionales y consultas prenatales!). Ya sea utilizando un calendario, monitoreando tu temperatura corporal o prestando atención a las características del flujo cervical, puedes determinar de mejor manera cuándo es más probable que ovules y, por lo tanto, aumentar o disminuir las posibilidades de concepción según tus necesidades. Al tomar el control de este aspecto fundamental de tu salud, estarás mejor equipada para tomar decisiones que se ajusten a tus objetivos personales y reproductivos. Si no estás segura de si eres regular o te gustaría saber más respecto a tu ciclo menstrual, agenda una consulta ginecológica con nuestras doctoras!
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