Durante el embarazo, se recomienda realizar una serie de ultrasonidos para asegurar que el bebé se esté desarrollando bien y que la salud de la mamá esté en buen estado. Estas ecografías no sólo son esenciales desde el punto de vista médico, sino que también les permiten a los futuros padres ver cómo crece su bebé.
Los ultrasonidos en el embarazo son considerados seguros, ya que utilizan ondas que no presentan un riesgo para la madre y el feto. Estas imágenes detalladas pueden ayudar a detectar posibles complicaciones a tiempo, garantizando así un seguimiento adecuado del embarazo.
Pero, ¿cuándo se deben realizar cada ultrasonido? Sigue leyendo para descubrir más acerca de cada ultrasonido especializado y cuándo se recomienda realizar cada uno.
A lo largo de tu embarazo, asistirás a consultas prenatales. En todas ellas, la doctora te hará un ultrasonido; sin embargo, adicional a estos, es necesario hacer ciertos ultrasonidos especializados:
Este ultrasonido se realiza entre las semanas 11-13.6 de gestación, y se recomienda entre las 12-13 semanas.
Sirve para evaluar:
• La presencia de alteraciones cromosómicas (una de las más importantes el Síndrome de Down).
• Riesgo de preeclampsia (presión alta).
• Riesgo de amenaza de parto pretérmino.
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El ultrasonido estructural debe hacerse entre las 18 y 22.6 semanas de gestación, aunque se aconseja realizarlo en las 21-22 semanas de gestación para tener los mejores resultados.
Tiene como objetivo:
• Observar la anatomía de tu bebé.
• Valorar si los brazos y piernas están bien formados, que tenga todos los dedos de manos y pies, las orejas, ojos, cerebro, pulmones y el resto de sus órganos.
• Se valora el corazón y es muy probable determinar el sexo de bebé.
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También se conoce como hemodinamia. Se realiza después de las 30 semanas hasta el nacimiento. Se aconseja después de la semana 32, siempre que no haya indicación de tu doctora de hacerlo antes.
Sirve para:
• Corroborar que tu bebé tenga buen crecimiento en relación al peso y a las semanas de gestación.
Identificar la implantación y función adecuada de la placenta.
• Detectar si mamá tiene riesgo de preeclampsia.
Examinar el estado de la circulación fetal en aquellos bebés con restricción de crecimiento.
• Vigilar el riesgo de anemia cuando la mamá es RH Negativo.
• Cuando se trata de un embarazo gemelar, la flujometría nos ayuda a la vigilancia del desarrollo y circulación entre los gemelos.
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El perfil biofísico se debe realizar después de las 28 semanas de gestación, ya que el cerebro y corazón de bebé hayan alcanzado la madurez para su valoración. Se recomienda después de las 30 semanas, siempre que no haya indicación de realizarlo antes.
Sirve para:
• Determinar el bienestar fetal, es decir, el riesgo de hipoxia intrauterina (falta de oxígeno en tejidos), mediante la evaluación de los siguientes parámetros fetales: reactividad cardiaca, movimientos fetales corporales, movimientos respiratorios fetales, tono muscular y volumen del líquido amniótico.
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Este ultrasonido realmente se puede realizar en cualquier momento; sin embargo, se aconseja realizarlo después de la semana 28 de gestación, ya que el bebé está más grande y se puede ver con mejor definición la cara fetal.Es una imagen estática donde se captura el feto como si se tomara una fotografía.
Sirve para:
• Evaluar la presencia y gravedad de posibles enfermedades como labio y paladar hendido, alteraciones en la columna vertebral.
• Ver a tu bebé más a detalle.
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Se puede realizar en cualquier momento del embarazo, sin embargo, se recomienda en el segundo o tercer trimestre para tener mayor detalle del crecimiento y desarrollo de tu bebé.
Sirve para:
• Ver que tu bebé tenga un buen desarrollo acorde a las semanas de gestación con el peso fetal estimado.
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Se realiza en embarazos menores a 11 semanas, en aquellas pacientes que tienen antecedente de embarazos pretérminos o alguna condición del cuello uterino que ponga en riesgo este nuevo embarazo.
Sirve para:
• Monitorear el desarrollo del embrión.
• Descartar desprendimiento de la bolsa del embrión.
• Medir la longitud del cuello uterino (cérvix).
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Es importante llegar 15 minutos antes de tu cita, puedes acudir acompañada de una sola persona y no es necesario que estés en ayuno. Te recomendamos usar ropa cómoda y es útil llevar estudios previos de ultrasonidos realizados durante el embarazo (imágenes y reportes), aunque si no cuentas con ellos, no hay problema.
Además, evita colocar crema, ungüento o cualquier tipo de pomada en el abdomen, ya que esto puede interferir con el estudio. Esto no aplica para el ultrasonido endovaginal.